La noche en que aplaudimos una esperanza

La construcción

El Presidente, que les ha visto todos los días a lo largo de estos diez años, porque por mandato de los Estatutos debe acudir cada día a la Cooperativa, es testigo del esfuerzo para llegar adonde han llegado: actores y directivos han trabajado de carpinteros, de paletas, de barrenderos, de pintores… meses y meses sin cobrar, ¡los que se quieran! Anna Lizaran, con un mono azul, pintaba decorados; Carlota hacía de carpintero, Imma Colomer limpiaba sillas, Muntsa Alcañiz cargaba escombros… Los viejos socios que pasaban la tarde en el café haciendo su manilla o jugando al dominó, dicen con admiración que “ellos nos han enseñado a nosotros a ser otra vez cooperadores».

Emili Teixidor

El estreno

Antes de iniciarse la primera representación de «Camí de nit, 1854», una sesión para profesionales del teatro, periodistas, amigos y algún invitado especial, como Rafael Vidiella, el público dedicó una larga ovación… al local. Ovación que el lector juzgará merecida en cuanto visite el nuevo teatro, lo cual le recomendamos sin reservas. No cabe duda que para una acción teatral viva y comunicativa, esta sala es la mejor que jamás haya tenido Barcelona.

Joan-Anton Benach

La recepción de la crítica

Mi comentario crítico a «Camí de nit» me costó reproches de todo tipo. Naturalmente, nunca podría desdecirme de lo que escribí. En cambio, sí me supieron mal las formas vocingleras que mi diario, “El Correo Catalán”, adoptó al publicar la crítica, titulada excepcionalmente a toda página, como si se buscase poner un altavoz a un hecho cultural poco logrado. «Noche del ‘Lliure’, qué triste noche” se desgañitaban las cinco columnas del periódico, fiel a aquella pulsión de buscar el modo más escandaloso de informar mediante un formato tipográfico en el que el autor de la información o de la opinión a menudo no tiene nada que ver con él. Justo es decir que, en esa misma página, se incluyó un recuadro que señalaba un aspecto que me parecía, y aún me parece, fundamental.

Joan-Anton Benach