- descripción
- «Hay un espectáculo invisible reservado a aquel que sea capaz de aventurarse en el laberinto de la mente del actor; un espectáculo que empieza a suceder frente a aquel que sucumbe a la tentación de ingresar por los intrincados pasillos en los que transitan muchas ficciones, sueños, olvidos, ángeles extraviados que determinan lo que hacemos hoy o lo que haremos mañana.»
Este laberinto es el que, nuevo Teseo, nos propone Luis de Tavira en sus ejercicios espirituales que, en forma de 365 aforismos (uno para cada día del año) forman El espectáculo invisible.